El hormigón pulido es también uno de los acabados más demandados para pavimentos exteriores e interiores. Su principal diferencia es que se consigue una superficie continua y totalmente lisa, sin juntas y libre de irregularidades. Por lo que no se necesita ningún molde superficial para realizar el acabado.
Hemos realizado este tipo de trabajo de hormigón impreso en Jaén capital y su provincia, con muy buenos resultados. De hecho, es la mejor opción para naves industriales o garajes. Aunque también es un recurso que se utiliza mucho en decoración industrial o minimalista para conseguir espacios diáfanos tipo Loft. Por el contrario, siempre se suele optar por hormigón impreso en espacios como jardines, patios o jardines, donde el acabado con juntas antideslizantes ofrece mayor seguridad además de valor estético.
CaracterÃsticas comunes al hormigón impreso
En cada uno de los trabajos realizados en Jaén con hormigón pulido, hemos podido observar que ambos acabados ofrecen también algunas caracterÃsticas similares. Al igual que el hormigón impreso, su mantenimiento prácticamente es nulo. También ofrece una alta resistencia al desgaste y puede ofrecer una superficie antideslizante si se juega con diferentes texturas. Además, es un material muy flexible que ofrece grandes posibilidades estéticas.
Cómo mantener el hormigón pulido
Es una de las preguntas más importantes de algunos de nuestros clientes habituales de Jaén. Y es que, aunque se trate de un material muy resistente, existe una especial preocupación ante el deterioro del brillo. Desde nuestra experiencia, podemos decirle que este tipo de superficies se mantienen muy bien incluso hasta más de 8 años y que en la mayorÃa de casos solo es necesario realizarle nuevamente el pulido para recuperar el brillo. No obstante, el primer enemigo de este tipo de materiales es la suciedad y el polvo. Si no se limpia la superficie frecuentemente y se eliminan esas partÃculas que van depositándose diariamente, el brillo acaba deteriorándose con mayor rapidez. No hay que olvidar que también se trata de una superficie porosa donde la suciedad puede penetrar con facilidad.
Por otro lado, hay que tener cuidado con el uso de productos quÃmicos demasiados agresivos que pueden causar efectos irreversibles sobre el hormigón pulido. Hay que utilizar productos especialmente diseñados para su uso en esta superficie que no contengan ácidos o Ph demasiado alto que pueda atacar a la superficie pulida y quitar el brillo. La mejor solución es fregar la superficie con abundante agua y usar fregona, evitando el uso de cepillos ya que pueden dañar la superficie. Y si existen manchas más persistentes se debe usar un producto Alcalino capaz de eliminar suciedades más profundas.
Lo ideal es mantener siempre la superficie limpia y utilizar también regularmente productos para proteger el brillo. Por ejemplo, utilizando un sellador se evitará también que cualquier mancha pueda penetrar en capas más profundas. Por último, también se puede aplicar alguna cera especifica que ayude a mantener el brillo como el primer dÃa. Además, también sirven como capas protectoras y aumentan la resistencia de la superficie.